jueves, 6 de noviembre de 2008

Tinte fascista Nº 1

Primera sección fija. Para ilustrar sobre mis creencias políticas y sociales.

La donación de órganos debería ser obligatoria. En serio. ¿Por qué rayos tiene uno que seguir teniendo derechos después de muerto? Los derechos humanos son para los humanos, no para los cadáveres. Los cadáveres deberían ser declarados materia prima de utilidad pública.

"Mi libertad de culto me permite que mi cuerpo, a pesar de poder salvar vidas, se lo coman los gusanos porque la resurrección eterna y blablabla". No.

Si crees en un Dios todopoderoso y benevolente, que además aprecia el sacrificio y el altruismo, créeme, te va a devolver tu hígado/corazón/riñón/córnea y etcétera, si te resucita en cuerpo y alma durante el Día del Juicio. No va a ser tan rata como para dejarte mocho, cuando puede hacer cualquier cosa. Es que te los pone hasta de barro, si quiere. Más todavía si los diste para que alguien sobreviviera y disfrutara de un tiempo extra que a tí ya se te acabó. Es sentido común, que según tú también te lo dio Dios. Además, los cadáveres no rezan, ni tienen fe. No tienen libertad de culto, ¿Estamos claros?

"Mi libertad de escogencia me permite que mi cuerpo sea cremado para lanzar las cenizas al mar en un último acto de cursilería ridícula". No.

Si quieres ser cenizas, y devolver tu energía al mundo y otro mumbo-jumbo, quémate vivo, cuando todavía lo puedes escoger. No dejes que otros lo hagan por tí. No malgastes recursos, sobretodo cuando hablamos de aquellos que son capaces de salvar vidas en peligro. Te pueden quemar sin hígado/corazón/riñón/córnea y etcétera, créeme que el mar no se va a dar cuenta de que te faltan, ni hace falta que los tengas para que te "disperse el viento" de manera romántica. ¿Vale?

"Tengo derecho a visitar al cuerpo de mi familiar en su tumba para recordarlo". No. Bueno, depende.

Vaya a la tumba. No se va a ver más fea ni las flores se pudren si no tiene el hígado/corazón/riñón/córnea y etcétera adentro. Igual no va a ver el cuerpo ni nada. Vaya a visitarlo, llore, lamente, recuerde, sonría. No hacen falta los órganos para eso. Si pudiéramos poner en riesgo vidas por sentimentalismos, protegidos por la ley, cada vez que me molesto manejando yo tendría todo el derecho a llevarme al motorizado que llevo al lado en la autopista.

"Tengo derecho porque tengo derecho y quiero escoger. Yo escojo que no me saquen los órganos porque me da grima, o porque soy un sociópata que no quiero ayudar a nadie".

Fino. Tienes tu derecho. ¿Y cómo vas a impedir que te los saquen, pregunto? ¿Te vas a levantar como zombie? ¿Me vas a jalar los pies después de muerto por haber donado a la fuerza tus tripitas? Trata o de quemarte vivo, o de que te dé cáncer con metástasis de la cabeza a los pies. Y con todo y eso, de seguro algo se puede rescatar.

Cuando yo sea Dictador del Nuevo Orden Mundial, (porque ese es el título al que aspira mi alter ego fascista), voy a instituir una base de datos sobre compatibilidad de órganos de manera obligatoria, y se los voy a expropiar a los cadáveres si hay pacientes en espera, y si no, que sean donados a la ciencia. Los cadáveres no tienen derechos.

3 comentarios:

vanesaurus dijo...

Ni necesidades.

Victor Silva dijo...

Solo por ponerlo escrito: Tus organos son propiedad privada!!!...si no dispusiste de ellos de ninguna forma y tu desendencia no los reclama ... en ese caso podrìa considerarse que el gobierno, en un último acto de destrucción de tu libertad y derechos, te mutile en favor de la turba parasitaria, que desea aprovecharse de ti porque comiste sano y te cuidaste toda tu vida e hiciste ejercicio desde que eras un feto......
"La única diferencia entre el estado y la mafia, es que el estado isa la bandera todos los dìas"....no recuerdo quien lo escribe

Kike dijo...

El problema es, al menos en Venezuela, que si estás en una lista de donante de órganos y tienes un accidente, es posible que te maten / dejen morir para quitarte los órganos y después digan que tú los donaste.
Es peligroso.

PD: NO dejes de escribir!!